FIBROMIALGIA
El dolor que nunca termina
La fibromialgia es un trastorno caracterizado por dolor músculo esquelético generalizado acompañado por fatiga y problemas de sueño, memoria y estado de ánimo. Los investigadores creen que la fibromialgia amplifica las sensaciones de dolor al afectar el modo en que el cerebro procesa las señales de dolor.
La fibromialgia está considerada como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud desde 1992 y, su consideración en el ámbito médico no ha estado exenta de controversia, los resultados de las investigaciones indican con bastante consenso que su origen es neurológico. El 12 de Mayo es el día Internacional de la Fibromialgia y la Fatiga Crónica.
En ocasiones, los síntomas comienzan después de traumatismos físicos, cirugías, infecciones o estrés psicológico significativo. En otros casos, los síntomas se acumulan gradualmente con el tiempo, sin que exista un suceso desencadenante. Muchas personas con fibromialgia también tienen dolores de cabeza tensionales, trastornos de la articulación temporomandíbular y síndrome de intestino irritable, En Mexico 2,3% de la población en general padece esta enfermedad. Afecta a las mujeres 10 veces más que los hombres. Se observa entre los 20 y los 50 años de edad, aunque existen niños y ancianos con esta enfermedad.
Algunos de los síntomas de la fibromialgia son:
• Dolor generalizado. Se describe como un dolor leve, molesto y constante, que dura al menos tres meses. Para que se considere generalizado, el dolor debe darse en ambos lados del cuerpo, y arriba y abajo de la cintura.
• Fatiga. Las personas que padecen fibromialgia con frecuencia se despiertan cansadas, aunque duerman mucho. Con frecuencia, el sueño se interrumpe por el dolor, y muchos pacientes con fibromialgia tienen otros trastornos del sueño, como síndrome de las piernas inquietas, pesadillas
• Dificultades cognitivas. Un síntoma comúnmente llamado «fibroniebla» dificulta la capacidad de enfoque, atención y concentración mental.
• Trastorno de Ansiedad/Depresión.
Antes de hacer un diagnóstico de fibromialgia, los pacientes deben ser evaluados a fondo para determinar la presencia de otros trastornos. Los pacientes con fibromialgia no presentan anormalidades en las pruebas de laboratorio. Sin embargo, los estudios de laboratorio de rutina y de imagen son importantes para descartar enfermedades con síntomas similares y para el diagnóstico de ciertas enfermedades inflamatorias que aparecen frecuentemente junto con la fibromialgia.
Aunque todavía no existe una cura para la fibromialgia, hay tratamientos que han demostrado ser eficaces en la reducción de los síntomas como la educación del paciente, el ejercicio, la psicoterapia y el consumo de ciertos fármacos. Algunos pacientes presentan síntomas leves y necesitan muy poco tratamiento una vez que comprenden el trastorno que padecen y lo que la empeora. Otras personas, sin embargo, necesitan un programa de cuidado completo, que incluirá medicamentos, ejercicio y entrenamiento acerca de las técnicas para el manejo del dolor.
Crees que puedas padecer esta enfermedad, acércate a tu médico reumatólogo para una valoración integral.